Desde su nacimiento en 09’, y posterior expansión de su circulación entorno al 2011, el mercado del bitcoin ha sido un fenómeno u oportunidad de inversión global que ha inspirado por igual entusiasmo y recelo. Puedo afirmar lo mismo respecto al resto de criptomonedas sin miedo a equivocarme.
Pero una nueva generación de emprendedores conocedores de la tecnología – que tal vez tienen un miedo justificado a los intentos de todos los gobiernos por regular un mercado online realmente libre y completamente accesible – ha abrazado la emocionante oportunidad de inversión, mientras que los establecimientos financieros más tradicionales miran con recelo cada criptomoneda y toda la tecnología de la blockchain con pura y dura sospecha. Efectivamente, la salvaje especulación que continúa girando entorno a casi todas las criptomonedas, así como los ciclos de crecimiento y caídas fuera de control de esta inestable “oportunidad” de inversión, solo han ocasionado que muchos inversores tradicionales se alejen incluso más cautelosamente.
Mi Ejemplo de Ello: La súbita caída del bitcoin de la semana pasada, tras las primeras operaciones con futuros de bitcoin en el CBOE
El Factor CBOE
A pesar de que indudablemente el bitcoin es una de las más comúnmente conocidas criptomonedas – con Coinbase como su corretaje y plataforma de cartera que sirve actualmente a más de 13 Millones de usuarios activos – el precio del bitcoin siempre ha sido al mismo tiempo impredeciblemente volátil, y predeciblemente consistente en su volatilidad. El ejemplo alarmante más reciente tuvo lugar en las tres primeras semanas de enero, cuando el precio del bitcoin subió del los 14.000$ hasta los 17.000$ antes de desplomarse brevemente hasta los 9.000$ durante el 17 de enero. Como queriendo reforzar su propia volatilidad, en estos momentos, los precios han escalado de nuevo hasta el territorio de los 5 digitos (a 27 de enero está en 11.414$).
Y para recalcar aún más todo esto, la caída del 17 de enero no ha sido particularmente inusual, con la divisa hundiéndose hasta un 25% a mediados de noviembre, recuperándose después, y cayendo de nuevo un 30% a mediados de diciembre. Puede que lo que sea incluso más desconcertante para los inversores tradicionales es que además del bitcoin, otras criptomonedas también cayeron el pasado martes, con el ethereum – la segunda mayor en cuota de mercado tras el bitcoin – hundiéndose hasta un 23%.
Considerando la gran propagación del mercado de las criptomonedas junto con el tamaño de la súbita caída del bitcoin sufrida la semana pasada, muchos inversores sospechan de la relación simbiótica entre el recientemente establecido mercado global de los contratos a futuros de bitcoin en el CBOE y el más antiguo espacio del bitcoin podrían haber sido un gran factor relacionado con la caída.
En primer lugar, vamos a profundizar en el trasfondo/detalles referentes al comercio del CBOE
- Los contratos de futuros de bitcoin se comerciaban en el CBOE desde su lanzamiento el 10 de diciembre de 2017, y estaban destinados a expirar el pasado miércoles 17, una fecha límite/proceso puede a menudo llevar a volatilidad en el trading.
- Los mercados globales de contratos de futuros del CBOE cubrieron un solo bitcoin con el contrato inicial.
- En la fecha final del acuerdo, el tiempo para comerciar acababa a las 3:45 pm EST, con los contratos de futuros situados en algo designado como “estado cerrado”, un segundo antes del tiempo de expiración. Cualquiera de las operaciones que el sistema del CBOE no fuera capaz de emparejar o procesar antes de ese momento, serían por tanto no aceptadas.
- El valor del acuerdo final de los contratos de futuros expirados fue por el precio de puja decidido a las 4 p.m (EST) para el bitcoin en ese día. El 17 de Enero, ese precio se bloqueó entonces en 10.900$.
- Los futuros fueron liquidados en efectivo, lo que quiere decir que en realidad ningún bitcoin cambió de manos.
- En cambio, los inversores que había comprado futuros de bitcoin acabaron con un beneficio neto o una pérdida neta determinada por la cantidad exacta en la que el precio del bitcoin había subido o bajado cuando compraron los contratos de futuros. Los inversores que habían vendido futuros de bitcoin, sin embargo, ganaron un beneficio neto si el precio del bitcoin había descendido desde su venta, o sufrieron pérdidas si el precio del bitcoin había subido dentro de ese espacio de tiempo.
Para mi, la clave aquí está en que incluso el trading tradicional de futuros con una inminente fecha límite de expiración ha sido a menudo, si no la causa, al menos lo que ha causado la locura de operaciones al estilo del salvaje oeste.
En el comercio con futuros de bitcoin, por ejemplo: en enero 16 compradores, (en aprox. 13.000$) perdieron al cierre, mientras que en enero, 16 compradores anotaron al cierre del mercado (saliendo a 10.900$). La “apuesta” de futuros aquí requirió de una investigación más detallada en relación al bitcoin, y un poco de suerte a la hora de apostar para salir ganando.
Pero en mi opinión, no creo que el comercio del CBOE fuera una causa directa de la caída general del precio del bitcoin. Más bien, lo veo como un factor que contribuyó a ello.
Otros factores que contribuyeron:
- La caída de la semana pasada también tuvo lugar tras las represiones de los gobiernos tanto de Corea del Sur (un punto caliente del trading con criptomonedas) como de China (dónde los activos de criptomonedas son una fuerza popular) hacia la regulación del trading online.
- Además, la semana pasada, las autoridades chinas ordenaron el cierre de un gran número de operaciones de minado de bitcoin doméstico, prohibieron las ICOs, y bloquearon/prohibieron el uso de un número importante de sitios de trading online con criptomonedas extranjeros.
El poder e influencia tanto de Corea del Sur com de China en el mercado de las criptomonedas no debe pasarse por alto. Todos y cada uno de los intentos de grandes regulaciones por parte de los gobiernos, ciertamente reduce el anonimato de las transacciones con bitcoin, y podrían por tanto, legítimamente ser considerados como un factor que ha desprovisto de un gran atractivo al comercio con criptomonedas, tanto para los entusiastas del bitcoin como para los inversores globales que ya eran recelosos.
Los movimientos de regulaciones más estrictas por parte de Corea del Sur – y especialmente el duro golpe desde el interior de la segunda mayor economía del mundo – inmediatamente antes del comercio con futuros del CBOE ha tenido indudablemente, cuando menos, algún impacto directo en el entusiasmo de los inversores.
Además, los ajustes a la tecnología detrás del bitcoin, como el Segregated Witness – una actualización que permite que se procesen un número más significativo de transacciones por minuto – reducen las costosas tasas por transacción y, a medida que pasa el tiempo y mejora su fiabilidad, también se podría reducir la volatilidad del mercado a un grado más asumible.
Conclusión
Parece probable que si los futuros de bitcoin continúan creciendo en popularidad, las condiciones podría cambiar y los futuros podrían empezar a tener un incremento en la influencia del mercado. Al menos por ahora, sin embargo, los factores inestables como la liquidación de efectivo, la influencia china, y aún un bajo nivel de interés por parte de los inversores no han empujado los futuros de bitcoin a la preocupación tradicional del trading. A no ser qué, o hasta que, el bitcoin pueda solidificar de manera fiable sus problemas de liquidez, resuelva el puzzle chino y/o encienda la chispa de la confianza del inversores, el mercado de futuros de bitcoin casi seguramente estará a merced directamente de los intercambios con criptomonedas que hagan los traders.
Como resultado, el precio del bitcoin continuará fluctuando drásticamente, y el establecido trading tradicional continuará alejándose.
En palabras del mayor visionario de las finanzas tradicionales, el propio “Oráculo de Omaha”, Warren Buffet (CEO de Berkshire Hathaway) declaró el 10 de enero antes de la operación:
“En términos de criptomonedas, generalmente, puedo decir con casi total seguridad que tendrán un amargo final… si pudiera abrir una operación “baja” a cinco años en todas y cada una de las criptomonedas, lo haría encantado pero no invertiría ni un centavo a corto plazo.”
Los futuros de bitcoin podría efectivamente tener un futuro lucrativo, van a hacerte falta muchos fondos y una mirada atenta si quieres salir bien parado.