La industria automotriz se revoluciona y se reinventa a sí misma. Se trata de una transformación sin precedentes. Mientras que países occidentales como Francia y Alemania pretenden que dentro de diez años no sea posible producir un automóvil a gasolina o diésel en su terriotorio, China acaba de dar un paso gigantezco en este sentido. China lidera, una vez más, un cambio a nivel global.
La nueva regulación sancionada por el Partido Comunista Chino, condiciona la distribución de los automóviles tradicionales para darle lugar a los automóviles eléctricos.
El gobierno chino dispuso que cualquier fabricante de automoviles que produzca más de 30.000 unidades (que son la amplia mayoría en China), deberá producir, como mínimo, un 10% de sus carros, eléctricos, impulsados por hidrógeno o híbridos para 2019. Esta medida, está estipulado, será de corte progresiva. El 10% se transformará en 12% para el año 2020.
El mercado automotriz en China ha crecido de 2 a 28 millones entre el 2000 y el 2016. Se estima que supere los 30 millones para el 2020. El país en sí, es el prouctor a gran escala de automóviles eléctricos más competitivo del mundo. Los vehículos fabricados en China representan una amenaza para los fabricado en EEUU o en México, puesto a que, como en la mayoría de los casos, los chinos pueden hacerlo muy bien y a bajo costo.
China es, al día de hoy, el principal consumidor y productor (aprovechando incentivos gubernamentales) de autos eléctricos. Se calcula que para 2025, se habrán producido unas 4 millones de unidades en el gigante asiático.
El exponencial crecimiento del mercado de automóviles eléctricos en China es una de las principales razones por las cuales automotrices del mundo entero se vuelcan hacia esta tendencia que, a las claras, no tiene vuelta atrás.
El gigante asiático ya ha transformado otras industrias en el pasado, tal es el caso de la indumentaria y el acero entre muchas otras. Generalmente, estas transformaciones implementadas por China están basadas en una mano de obra barata y en incentivos gubernamentales. En el caso de los vehículos, la transformación de la industria impulsada por China, promete ser extraordinaria y a gran escala.
Autos eléctricos
En mayor o menor medida, las automotrices más importantes del mundo ya se están adaptando. Algunas están a la vanguardia, otras siguen la tendencia. Lo cierto es que el reemplazo de los automóviles a gasolina o diésel por los vehículos eléctricos o híbridos es ya un camino sin retorno.
Ford
La empresa ha anunciado que sacará al mercado 13 modelos diferentes de autos eléctricos, invirtiendo sumas exorbitantes en tecnología. ¿El Objetivo? Que el 70% sus vehículos sean híbridos para el año 2025.
Entre los modelos en los que Ford está trabajando se encuentra una SUV completamente eléctrica. También versiones híbridas de sus representativos modelos Mustang y F-150. Como si esto no fuese suficiente, la compañía estadounidense trabaja en un vehículo totalmente autónomo para uso comercial y dos vehículos policíacos híbridos con capacidad para persecución a alta velocidad.
Este año, Ford anunció la expansión de su trabajo en investigación y el aumento de su presupuesto en desarrollos tecnológicos. Al mando está un equipo especial denominado Team Edison; este estará dedicado al estudio y el desarrollo de vehículos eléctricos totalmente independientes y separado de los esfuerzos previos de la empresa en materia de electrificación.
Como si todo esto fuera poco, la compañía fundada por Henry Ford en 1903, también anunció que redestinará recursos originalmente para el desarrollo de modelos tradicionales, para el desarrollo de autos eléctricos. Evidentemente, están cambiando el foco y las prioridades.
General Motors
Incluso cuando Ford invierte millones, este está muy por detrás de General Motors. GM asegura que lanzará 20 vehículos eléctricos para el año 2023. El vicepresidente de la compañía, encargado de desarrollo global de producto, Mark Reuss, afirmó: “General Motors cree que el futuro será totalmente eléctrico y que el mundo se liberará de emisiones tóxicas”. ¿Quién hubiese imaginado esto 10 años atrás? Solamente unos pocos.
Volkswagen
El gigante automotriz alemán se volcó de lleno al desarrollo, la producción y la comercialización de automóviles eléctricos luego de los últimos escándalos que protagonizaron algunos de sus vehículos emitiendo grados ilegales de diésel en el año 2015.
La compañía ya comercializa el e-Golf, la versión eléctrica de uno de sus vehículos más vendidos de la historia. La empresa planea lanzar al mercado una gran cantidad de autos eléctricos en el futuro inmediato.
Volvo
La tradicional automotriz sueca, anunció que en el año 2019, dejará de introducir al mercado automóviles equipados solamente con motores de combustión interna. La compañía también confirmó que su primer unidad totalmente eléctrica será la Crossover Compacta XC40.
Mercedes-Benz
En un principio, una de las compañías que patrocinó a Tesla con más entusiasmo, Mercedes-Benz ha anunciado que tendrá disponibles versiones eléctricas de todos sus modelos para 2022. Esto representa, ni más ni menos, que miles de millones de dólares.
Mercado
El mercado automotriz está cambiando para siempre y nunca volverá a ser el mismo. Habrá movimientos en el valor de la compañías productoras de automóviles y en el precio de sus acciones. Las consecuencias que esta revolución automotriz tendrá para cada una de las automotrices, dependerá de la audacia con la que estas se muevan y logren adaptarse.
Las aumototrices que lideraron la industria durante décadas pueden adaptarse, o no. Compañías productoras de automóviles que alguna vez estuvieron entre las menos rentables pueden transformarse en las más. Lo cierto es que se vienen tiempos de cambio. Cambio en las prioridades, en la producción y en lo que tiene que ver con los incentivos gubernamentales que promuevan la velocidad de este cambio.
Por su parte, las empresas productoras de vehículos que no se adapten a este cambio, pasarán a la historia como pasarán los vehículos a gasolina o a diésel.
