Disponer de una lista de tareas para seguir antes de cada operación es una técnica genial, especialmente si eres un trader principiante. Te ayudará prevenir decisiones precipitadas. Si notas que tus operaciones están altamente influenciadas por tus emociones, este enfoque te ayudará a mejorar tu estrategia.
Las listas de tareas son una parte importante de casi cualquier profesión y te ayudan a hacer las cosas según cierto orden. Seguir una lista y mantener un orden estricto es prácticamente una garantía de un flujo de trabajo organizado. Establecer y ordenar tareas en papel también ayuda a organizar nuestras ideas y a poder seguir los progresos.
Puede, y debería ser, aplicado al trading: las listas proporcionan muchos beneficios y probablemente el más obvio es su simplicidad. No hay nada más fácil que seguir un plan que ya ha sido preparado anteriormente. Usa estos útiles consejos para crear tus propias listas de tareas personalizadas y utilizarlas a la hora de abrir nuevas operaciones.
1. Análisis de mercado
¿Cuales son las condiciones del mercado en el que vas a operar? El resultado de la operación depende de tu habilidad para evaluar las condiciones en las que estás operando actualmente.
En la lista de tareas puedes establecer puntos tales como la dirección del mercado y la fuerza de la tendencia, y basándote en ellas tomar la decisión sobre el intervalo de tiempo con el que vas a operar y la estrategia que vas a implementar.
Tu lista puede ser tan detallada o tan concisa como quieras. Dependiendo de tus preferencias, puedes incluir indicadores, líneas de soporte y resistencia o ciertas fuentes de noticias de mercado en la lista, para no olvidarte de comprobar la información y tenerla en cuenta.
2. Especificaciones de operaciones
Continúa tu lista de tareas con una segunda sección que sea más específica sobre la operación que vas a abrir. Aquí, los puntos que tienes que escribir serían la cantidad de inversión, los niveles de stop loss y take profit, y los intervalos de tiempo para una operación en particular.
Tus decisiones deben estar documentadas, de esta forma tu lista de tareas será igual de útil cuando cierres la operación. Te será posible echar la vista atrás y encontrar patrones de trading y elecciones.
3. Gestión de riesgos
La tercera parte de la lista de tareas es la última pero no por ello menos importante. Se trata de la sección “contrólate a ti mismo” dónde tienes que volver a comprobar todo una vez más antes de pasar a ejecutar la operación. Los puntos de esta sección te ayudarán a controlar la operación desde un punto de vista de la gestión de riesgos. ¿Es la cantidad que vas a invertir racional? Has establecido unos límites para cerrar la operación a tiempo? Si la operación provoca pérdidas, ¿puedes permitírtelas?
Volver atrás para comprobar todo de nuevo puede parecer excesivo y aburrido, pero es realmente importante hacerlo para tomar una decisión más precisa y racional.
Disponer de una lista de verificación te ayudará a tomarte tu tiempo y a evaluar la operación que estás a punto de abrir sin el componente emocional que evita que muchos traders tomen las decisiones acertadas.