Aquí 6 máximas que será necesario tener en cuenta para tener una situación financiera ordenada y/o resuelta. Incluso si aún no hemos amasado una fortuna, es posible aprender a multiplicar lo que tenemos y poner el dinero a trabajar para nosotros mismos. Aquí 6 sugerencias.
1. No gaste todo lo que tiene
La mayoría de la gente trabaja o invierte, gasta el dinero haciendo lo que le gusta, y ahorra un remanente. Desafortunadamente, lo destinado al ahorro es, en la mayoría de los casos, poco o nada. Se aconseja, cada vez que se recibe el salario, dejar a un lado algo de dinero destinado a la realización de nuestros objetivos y a la inversión en nuestro futuro.
Recuerde que no será necesario ser extremista; seguirá siendo una prioridad pasársela lo mejor posible y hacerse regalos para así disfrutar todo el sabor de la vida. En cualquier caso, siempre es una buena idea abrir una caja de ahorros y destinar una porción de cada salario a esa cuenta, o incluso programar una transferencia electrónica mensual. Esto no solamente es importante en el aspecto financiero, sino que además es psicológicamente saludable.
2. No olvide tener un presupuesto, dejar de postergar su elaboración
Si usted quiere tener verdadero control sobre su dinero, será necesario saber exactamente en qué lo está gastando – además de planear con anticipación cómo gastarlo. Una opción que puede facilitar este proceso es la regla 50/20/30, que es lo suficientemente flexible como para adaptarse a casos particulares.
- 50% para los gastos esenciales: vivienda, transporte, cuentas y comida.
- 20% para las prioridades financieras: retiro, ahorros y deuda (en este orden).
- 30% en elecciones de un estilo de vida, lo que significa: regalos, viajes, comidas afuera, compras y todo lo demás.
Una vez implementado este método, será mucho más fácil hacer un seguimiento de nuestros gastos, asegurándonos de que estamos gastando el dinero tal como lo planeamos. Para hacer este seguimiento hay dos opciones:
a) crear una tabla en un archivo de Excel.
b) hacerlo a la vieja usanza con un bolígrafo y un papel. En caso de usar un formato digital, será posible, incluso, ver la tendencia de nuestros gastos.
3. No subestime los ahorros de emergencia
Es muy frecuente que las personas guarden unos $2,000 o $3,000 como «dinero de emergencia». Esto puede ayudar en caso de que tengamos que comprar un ticket de avión a último momento o algo por el estilo, pero lo cierto es que no ayudaría mucho en caso de enfermarnos, tener un verdadero imprevisto o alguna otra circunstancia inesperada que arruine nuestros planes.
Lo ideal sería poder acumular algo así como 6 meses de nuestros ingresos en nuestros ahorros de emergencia y sólo utilizar estos fondos en caso de una verdadera situación extraordinaria. En caso de su salario aumentar o disminuir, asegúrese de que esta modificación se vea reflejada en la cantidad de dinero que se está disponiendo, tanto para los ahorros de emergencia como para los ahorros tradicionales.
4. No perder oportunidades para hacer crecer nuestro patrimonio
Recuerde no detenerse luego de haber conseguido un trabajo bien pago. Siempre hay maneras extra de mejorarnos a nosotros mismos y a nuestra situación financiera. Estas pueden ir desde trabajar en aumentos y ascensos, pasando encontrar otras fuentes de ingreso, hasta comenzar nuestro propio negocio. El desarrollo personal es la inversión más valiosa y por lo tanto debe ser tenido en cuenta y alimentado.
Sugerencia: en la medida que sus ingresos aumentan, asegúrese de no aumentar los gastos de su estilo de vida en la misma medida.
5. No tome decisiones financieras basadas en sus emociones
En vez de comprar o vender inversiones basado en sus sentimientos y emociones, enfríe su mente y cree un plan serio con objetivos a largo plazo.
Es comprensible que no sea sencillo dejar las emociones a un lado cuando se trata de dinero, y es por ello que resulta tan importante hacer el esfuerzo y tener una estrategia que nos prevenga de la toma de decisiones irracionales. También puede ser útil establecer una serie de reglas a seguir antes de comprar nuevas inversiones.
6. No tenga todos los huevos en una misma canasta
La necesidad de diversificar es real y puede derivar en una diversidad de ingresos, multiplicándolos en nuestro favor.
Eso significa que, en lugar de, digamos, hacer depender su jubilación del éxito de las acciones de su empleador, o gastar todos los ahorros en proyectos inmobiliarios, las personas exitosas apuntan a varias fuentes diferentes de riqueza, para permanentemente analizarlas de manera holística como parte de un gran portfolio.
Esperamos que estas sugerencias le hayan sido útiles y que pronto mejoren su situación, por más buena o mala que sea. Como siempre, invitamos a nuestros usuarios a participar y compartir con nuestra comunidad IQ Option consejos o experiencias que puedan servir a todos.